Urgencias domesticas en veterinaria

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Enfermedades

Lo principal en estas situaciones es guardar la calma, intentar tranquilizar al animal, actuar con sentido común e ir al veterinario.

En muchas ocasiones el dolor que siente el animal hace imposible ayudarle. Un perro herido no entiende lo que le está pasando y suele colaborar bastante poco.

Entónces, como dijimos, lo primero es tranquilizarse y utilizar el sentido común.

Luego:

Valoraremos el estado del animal: respira, está consciente, sangra, dónde tiene heridas, puede tener algo roto, se mantiene en pie, etc.

Antes de actuar hay que corroborar que el animal se deje tocar. Si lo forzamos en demasía, la situación puede agravarse y el animal puede mordernos.

Si el animal nos deja tocarlo y actuar, lo que sigue es aplicar el sentido común : Frenar la hemorragia por presión, no mover una extremidad que está claramente rota, no intentar extraer cuerpos extraños clavados. La cuestión es paliar lo impostergable con el menor número de acciones y movimientos.

Como norma general, debemos intentar mantener al animal tal y como lo encontramos, trasladarlo sin movimientos bruscos y no intentar "colocar" ni "quitar" nada.

Lo mas importante es ponerse inmediatamente en contacto telefónico con el veterinario o con la clínica de urgencias; ellos nos indicarán qué debemos hacer: Si debemos o no presionar la herida que le hemos descrito, si hacemos un torniquete y cómo, etc.